

Cómo la pasión de Trump por la TV está influyendo en la diplomacia de EEUU
La repentina preocupación de Donald Trump por los palestinos hambrientos fue un gran cambio de actitud del presidente de Estados Unidos, quien antes había ignorado las interminables súplicas de ayuda de los grupos humanitarios. ¿Qué pasó?
En palabras del propio Trump, esta inflexión se debe a las imágenes de niños desnutridos en Gaza que vio en la televisión, el medio que hace tiempo moldea su visión del mundo e influye en sus decisiones políticas y diplomáticas.
Trump dejó clara su afición por la pantalla chica a finales de julio, cuando le preguntaron si estaba de acuerdo con que no había hambruna en Gaza, como acababa de afirmar el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, un importante aliado de Estados Unidos.
"Basándome en la televisión, diría que no realmente, porque esos niños se ven muy hambrientos", dijo el mandatario republicano.
"Eso es hambre real. Lo veo y no se puede fingir eso", añadió.
Desde entonces, este multimillonario de 79 años ha repetido que se debe llevar ayuda a las personas en Gaza, el territorio palestino devastado tras 22 meses de guerra de Israel con el movimiento islamista Hamás, aunque aún no ha anunciado acciones diplomáticas al respecto.
"Trump tiene la reputación de no leer nada, ni siquiera los informes que le preparan sus asesores, y de pensar siempre que sabe todo mejor que cualquiera", sostuvo Dan Kennedy, profesor de periodismo en la Universidad Northeastern.
"Por lo tanto, no sorprende que las imágenes en la televisión lo afecten, especialmente porque es conocido por pasar mucho tiempo viendo televisión", agregó.
- "Veo los programas" -
El presidente republicano ha tenido, desde su investidura en enero, 22 sesiones informativas de los servicios de inteligencia, según un conteo de la AFP.
Pero desde su primer mandato (2017-2021), numerosos artículos de prensa han revelado que no se interesa mucho en los análisis de expertos en seguridad nacional.
Sin embargo, su amor por la televisión está bien documentado, incluso cuando se trata de decisiones importantes.
En 2015, antes de llegar por primera vez a la Casa Blanca, Trump respondió a un periodista que le preguntó cómo se informaba sobre temas militares: "Veo los programas".
Durante su primera presidencia, el New York Times reveló que Trump pasaba varias horas al día pegado al televisor, siguiendo sobre todo el canal Fox News, el favorito de los republicanos, pero también CNN, NBC, ABC.
Aunque su última campaña electoral se enfocó de manera significativa en podcasters e influencers, Trump sigue siendo un ávido consumidor de programas televisivos.
"Es un producto de su generación", apuntó Kennedy, "no pasa su tiempo en TikTok".
En su plataforma Truth Social, Trump comenta casi en directo los programas que ve. En una larga entrevista telefónica el martes con el canal CNBC, afirmó: "Vi CNN la otra noche (...). No tienen audiencia y probablemente soy la única persona que ve ese canal".
- "Gran momento televisivo" -
Trump, que no duda en publicar montajes realizados por inteligencia artificial, siempre ha sido muy sensible a las imágenes.
En octubre de 2019, al describir la operación militar estadounidense en Siria que culminó en la muerte del líder del grupo Estado Islámico (EI) Abu Bakr al Baghdadi, dijo: "Fue algo increíble de ver. Pude verlo (...) desde la Sala de Situación. Vimos la operación con mucha claridad, era como si estuvieras viendo una película".
El republicano, presentador de 14 temporadas de la serie televisiva "The Apprentice", sabe mejor que la mayoría cómo usar las imágenes.
"Esto va a ser un gran momento televisivo", dijo luego de arremeter contra el presidente ucraniano Volodimir Zelenski, en una impactante reunión frente a la prensa mundial en la Casa Blanca en febrero.
Espectador entusiasta, el presidente estadounidense no duda en utilizar imágenes que le han impactado o interesado para crear una dinámica de poder diplomático.
En mayo, tendió una verdadera emboscada al presidente sudafricano Cyril Ramaphosa, obligado a ver en el Despacho Oval un montaje de video lleno de errores y supuestamente destinado a respaldar acusaciones de "genocidio" contra agricultores blancos en Sudáfrica.
Desde entonces, el presidente estadounidense ha declarado que "probablemente no" asistirá a la cumbre del G20 prevista en noviembre en Sudáfrica, y ha impuesto al país aranceles aduaneros del 30%, la tasa más alta para África subsahariana.
F.Gonzalez--BT